Cartel Semana Santa 2012 – Blog S-Clavos (Mª José López Marín)


Aunque el título del cartel es Semana Santa 2012, está a un hecho poco conocido que fue descubierto en la última restauración a la que fue sometida la imagen del Cristo del Buen Viaje en las dependencias  del IAPH. Y es que, el Jueves Santo del 25 de Marzo de 1937 fue cuando el devoto Cristo del Buen Viaje se adentró en el corazón de Huelva por primera vez de manera constatable. El hecho se produjo en una ciudad aún maltrecha por la contienda civil; las Hermandades buscaban la reorganización con el patrimonio enteramente destruido, a excepción de la que nos ocupa que podía representar con entereza la Pasión de Nuestro Señor. Así cabe hablar de oficialidad en esta procesión del Jueves Santo, como nos detallan los diarios ABC y Odiel de la época, ya que los cortejos iban acompañados de los nazarenos de la Cofradía de Pasión en las Cadenas, Expiración en el Buen Viaje, y los propios de la Hermandad mercedaria en la Virgen de los Dolores. Este experimento cuajó en los cofrades de la Vega Larga, pues en 1941, encontramos la idea de una procesión más regular, que se hizo viable en 1944, no siendo hasta 1945 y de una manera más o menos continuada en años venideros, cuando se llevó a cabo dado las inclemencias meteorológicas del año anterior. Aunque dentro del título de la Corporación la advocación de la imagen no quedara reflejada oficialmente hasta el año 1948.

La obra en cuestión se halla realizada, por la joven artista, María José López Marín ( lopezmarinfleurs@gmail.com ), licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla,  presenta un formato de 50 por 70 centímetros, siendo la naturaleza del soporte la madera, la cual se halla hábilmente insertada en la obra pictórica aumentando con ello la vibración entre pintura y realidad. Respecto al método, la autora fiel a su forma de ejecutar, combina con gran acierto diversas técnicas tales como el dorado, la pintura acrílica y la pintura de aerosol, dando con ello un resultado muy efectista que sin duda quedará algo mitigado tras los irremediables trabajos de impresión. Respecto a la composición, centrado y presidiendo, se nos muestra la talla del Señor del Buen Viaje en un escorzo irreal fruto de la reelaboración de la artista, quedando escoltado por el texto, para cuya realización ha destinado la pintura de aerosol. La imagen del Cristo formada a través de grandes manchas de color, sigue fielmente la estela dejada en anteriores creaciones de la artista, no solo en la composición, sino en lo que a colorido se refiere destacando los tonos azules, amarillos y naranjas, realizados todos ellos con acrílico. En lo que se refiere a simbología, de la testa de la Imagen parte un halo de santidad que queda formado, según la tradición cristiana, por formas redondas de tonos áureos para cuya ejecución la artista ha recurrido al pan de oro que refuerza este concepto en la obra original. Queda recortada la figura en un fondo de tintes malvas aludiendo con ello al hábito nazareno que en aquella primera recordada estación de penitencia acompañó a ésta venerada efigie, de cuyo centro parte un rayo de color corinto que en esta ocasión representa el hábito nazareno que desde entonces acompaña al Cristo por las calles de la ciudad. Con todo ello, López Marín, nos deja una obra de gran contemporaneidad, que conjuga el valorado arte barroco con el poco reconocido arte actual, lenguaje que sin duda creemos debe dejarse ver más en este tipo de publicaciones, para acercarnos al ciudadano de a pie, consiguiendo con ello evitar la imagen arcaica y denostada tan alejada de la realidad que gran parte de la sociedad tiene del ámbito cofrade.

(Del Blog S-Clavos)